MANUEL RUIZ - Carlos Mena, dirección musical - Antonio Ruz, dirección escénica - Il primo uomo
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- MANUEL RUIZ - Carlos Mena, dirección musical - Antonio Ruz, dirección escénica - Il primo uomo
- 2025-03-30T20:00:00+02:00
- 2025-03-30T23:59:59+02:00
Precios localidades: 20 € - COMPRA DE ENTRADAS
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Ficha Artística
Manuel Ruiz, contratenor
Íliber Ensemble
Mar Blasco (concertino), Gevorg Vardanyan y Adrián Pineda, violines I
Cristina Altemir, Lidia Fernández Rodríguez y José Ángel Vélez, violines II
Marta Sampere y Helena Reguera, violas
Héctor Hervás, violonchelo
Javier Utrabo, contrabajo
Aníbal Soriano, tiorba
Darío Tamayo, clave
Director musical: Carlos Mena
Director de escena: Antonio Ruz
Vestuario: Pablo Árbol
Iluminación: Olga García
Maquillaje y peluquería: Ara García
Programa
Il Primo Uomo
I
Arcangelo Corelli (1653-1713)
Sarabanda de la Sonata para violín y continuo en fa mayor Op.5 nº10 [1700]
Georg Friedrich Haendel (1685-1759)
Sinfonia (Presto) de Rinaldo HWV 7b [1711/1731]
“Cara sposa, amante cara, dove sei?”, aria de Rinaldo HWV 7b [1711/1731]
“Son contenta di morire”, aria de Radamisto HWV 12 [1720]
Alessandro Scarlatti (1660-1725)
“Adam prole tu chiedi, e prole avrai… L’innocenza paccando perdesti”, accompagnato y aria de Cain overo il primo omicidio IAS 40 [1707]
II
Georg Friedrich Haendel
Concerto grosso en sol mayor Op.6 nº1 HWV 319
A tempo giusto – Allegro – Adagio – Allegro – Allegro
“Degg’io dunque, oh Dio, lasciarti”, aria de Radamisto HWV 12 [1720]
Antonio Vivaldi (1678-1741)
“Vedrò con mio diletto”, aria de Giustino RV 717 [1724]
III
Alessandro Scarlatti (1660-1725)
Sinfonia (Grave e piano) de Cain overo il primo omicidio IAS 40 [1707]
Georg Friedrich Haendel
“Empio, dirò, tu sei”, aria de Giulio Cesare in Egitto HWV 17 [1724]
Girolamo Kapsberger (c.1580-1651)
Passacaglia en re menor
Alessandro Scarlatti
“Dorme, o fulmine di guerra”, aria de La Giuditta (Nutrice) [1693]
Georg Friedrich Haendel
Largo del Concerto grosso en fa mayor Op.3 nº4a HWV 315 [1716]
“Lascia la spina”, aria de Il trionfo del Tempo e del Disinganno HWV 46a [1707]
Notas
En Due Dialoghi della Musica, un libro publicado por el sacerdote oratoriano Luigi Dentini en 1553, aparece por primera vez documentada la expresión soprano maschio (soprano masculino), que bien podía aludir al falsetista, pero igualmente apuntar al cantante castrado, una práctica que posiblemente saltó de España a Italia en algún momento del siglo XVI. Ya en 1589 el papa Sixto V reorganizó el coro de la Basílica de San Pedro para hacer que los castrati sustituyeran a niños y falsetistas. Es justo en el cambio del siglo XVI al XVII que el empleo de los castrati se promociona a gran escala en las iglesias romanas con el afán de conseguir una música que evocara el canto celestial de los ángeles. Y es justo en ese cambio de siglo cuando en algunas cortes del norte de Italia empieza a desarrollarse el espectáculo que hemos llamado ópera. El Orfeo de Monteverdi, que se estrenó en la corte ducal de Mantua en febrero de 1607, fue posible entre otras cosas porque la vecina y amiga corte florentina prestó al príncipe heredero Francesco Gonzaga, organizador de la Favola, al castrato Giovan Gualberto Magli, que hizo hasta tres papeles en la presentación de la obra monteverdiana (la Música del Prólogo, Proserpina y la Mensajera o la Esperanza).
A lo largo del siglo XVII, la castración fue declarándose ilegal, al menos que los niños que la sufrían estuvieran de acuerdo en practicársela, pero habida cuenta que la operación se realizaba a edades prepúberes, habitualmente entre los 8 y los 10 años, hoy hablaríamos de un consentimiento por completo viciado en origen. Más bien cabe pensar en padres ambiciosos o sumidos en la pobreza que aspiraban a darles a los hijos que eran alabados por sus condiciones canoras vidas más cómodas, pero, pese a la fama y la riqueza que consiguieron algunos, el éxito fue mayormente esquivo para millares de estos niños fatalmente mutilados. Es cierto, en cualquier caso, que en su mayoría fueron cobijados, al menos algún tiempo, bajo las alas de alguna institución eclesiástica que les daba manutención, alojamiento y una formación elemental, lo que para muchos compensaba el sacrificio.
Fuera como fuese, a medida que la ópera apuntaba hacia el belcantismo, el castrato se convirtió en figura esencial del nuevo espectáculo, muy especialmente en la primera mitad del siglo XVIII, aunque la práctica subsistió subrepticia y residualmente hasta bien entrado el XIX, a veces camuflada en intervenciones quirúrgicas realizadas por razones de salud (hernias inguinales, infecciones, traumatismos testiculares o algún tipo de problema congénito eran usados habitualmente como justificaciones). No hay que olvidar que el Orfeo de Gluck en el estreno de Orfeo ed Euridice en Viena en octubre de 1762 fue el castrato Guadagni, a pesar de que la obra es considerada como la punta de lanza del movimiento reformista que vino justamente a acabar con los castrati en la ópera. Pero es que aún en 1824 se escribió un papel operístico destinado a un castrato: fue el de Armando en la ópera Il crociato in Egitto de Meyerbeer, estrenada en Venecia con Giovanni Battista Vellutti, el último de los grandes castrati operísticos, dándole voz. Ítem más, en 1913 se retiraba a los 55 años de edad del coro de la Capilla Sixtina el llamado último castrato, Alessandro Moreschi, mutilado por razones no del todo aclaradas y que, para decepción de los oyentes contemporáneos fascinados por el fenómeno, dejó incluso alguna grabación convertida en objeto de culto.
El rescate progresivo de la ópera barroca en el siglo XX obligó a escoger qué tipo de cantante iba a asumir los roles asignados originalmente a los castrados. Durante un tiempo, la preferencia apuntaba claramente a voces femeninas, sopranos y contraltos, pero en las últimas décadas del siglo, justo cuando el revival barroco se aceleró, se conoció el ascenso y promoción de los contratenores, cantantes que utilizan recursos técnicos para la producción del sonido con los que alcanzan las tesituras originales (que no otras características de su sonido) de los castrati, y hoy su presencia se ha hecho mayoritaria en esos roles.
El contratenor cordobés Manuel Ruiz se presenta en este espectáculo escénico cantando algunos roles que hicieron en su día castrati míticos como Senesino, la gran estrella de la compañía londinense de Haendel por más de diez años. Él estrenó por ejemplo el papel de César en Giulio Cesare in Egitto en 1724 e interpretó el papel principal de Rinaldo en la reposición de la obra en 1731 (en su estreno de 1711 cantado por otro castrato, Nicolino). En cambio, el papel de Zenobia de Radamisto no fue interpretado nunca por un castrato: en su primera presentación en abril de 1720, cuando Senesino, ya contratado como primo uomo de la compañía, aún no había llegado a Londres, lo cantó la soprano británica Anastasia Robinson; una vez Senesino en la capital inglesa, Haendel hizo una segunda versión de la obra, que se presentó así el 28 de diciembre con el cantante italiano de protagonista y la soprano Margherita Durastanti cambiando ese papel por el de Zenobia. No se conoce en cambio el nombre del castrato que cantó el rol de Anastasio en el estreno de Giustino de Vivaldi en el teatro Capranica de Roma por el carnaval de 1724, cuando el compositor veneciano había adoptado ya las formas hipervirtuosísticas de la opera seria a la napolitana, pues durante su primera etapa como operista, Vivaldi cultivó las formas venecianas más antiguas y eludió en lo posible el recurso al castrato.
Junto a la ópera, a principios del siglo XVIII el oratorio se había convertido en otro género de dominio de las grandes voces agudas, lo que favoreció el desempeño de los castrati. No sabemos quién cantó el papel del Piacere en el estreno en la Roma de 1707 de Il trionfo del Tempo e del Disinganno de Haendel, aunque teniendo en cuenta que al año siguiente el marqués Ruspoli fue amonestado por permitir que en La Resurrezione, el otro gran oratorio romano de Haendel, participase la soprano Durastanti, que fue sustituida por un castrato para la segunda presentación de la obra, bien cabe pensar que fue asumido por un castrato. Aunque Scarlatti trabajó mucho en Roma ninguno de los dos oratorios que se han incluido en programa tienen origen en la capital pontificia: La Giuditta es una obra napolitana, mientras que Cain fue estrenado en Venecia unos meses antes de la presentación haendeliana de Il trionfo.
© Pablo J. Vayón
Textos
Biografía
Manuel Ruiz, contratenor
Comienza su formación en Córdoba, su ciudad natal, en diversas agrupaciones musicales. Accede al Conservatorio de su ciudad natal y consigue el título como Profesor Superior de Viola en el CSM Rafael Orozco de Córdoba. Comienza sus estudios de Canto en Londres, en Guildhall School of Music and Drama, bajo la dirección de Andrew Watts y David Pollard. Licenciado en Historia del Arte y Máster en Cinematografía por la Universidad de Córdoba, en España continúa su formación vocal en el Coro Joven de Andalucía. Posteriormente pasa a formar parte del Coro Barroco de Andalucía, dirigido por Michael Thomas. Y es con esta formación con quien debuta como solista en varios teatros del norte de África y Andalucía.
Ha sido discípulo de Richard Levitt en Basilea (Suiza) y actualmente del contratenor Carlos Mena y la soprano Auxiliadora Toledano. También recibe consejo del contratenor Gérard Lesne. Además ha cantado Carmina Burana bajo la dirección de Carlos Padrissa
en la producción homónima de La Fura dels Baus, en el Auditorio Maestro Padilla de Almería en 2014.
Realiza diversos conciertos como solista con formaciones como la Orquesta Barroca de Cádiz o la Camerata Juventudes Musicales de Córdoba. El pasado octubre de 2023 participó en el estreno de metAMORfosis, ópera de pasarela compuesta por Diana Pérez Custodio, en el Auditorio Edgar Neville de Málaga.
Desarrolla su labor pedagógica en el Conservatorio Músico Ziryab de Córdoba, además de ser el Vicedirector de dicho centro. Así mismo cofunda el centro educativo de música y danza Tararea Laboratorio Musical, en Córdoba.
Íliber Ensemble
Íliber Ensemble es una formación de cámara dedicada al estudio y la interpretación de música antigua con criterios historicistas e instrumentos antiguos, fundada en Granada en mayo de 2013 e integrada por jóvenes músicos de distintos puntos de la geografía española. Dirigida desde su creación por el clavecinista Darío Tamayo, su actividad artística e investigadora se centra en la recuperación y difusión de aquellos repertorios que, a pesar de su gran calidad e interés, permanecen sumidos en el abandono y el olvido, con especial atención al patrimonio musical barroco español.
Desde sus inicios, han ofrecido conciertos en ciclos tan importantes como el Meet In Beijing Arts Festival (China), Festival Internacional de Música y Danza de Granada, Festival Internacional de Santander (FIS), Ciclos de Patrimonio Nacional, Proyecto MusaE del Ministerio de Cultura o las sociedades filarmónicas de Valencia y Burgos, así como en los festivales de música antigua de Granada (MAG), Córdoba, Úbeda y Baeza (FeMAUB), Aracena, Loulé (Portugal) y Vélez Blanco (FestiMUVB), entre otros. Esto los ha llevado a actuar en salas tan prestigiosas como el Auditorio Manuel de Falla de Granada, el Palau de la Música de Valencia o el Daning Theatre de Shanghái, y en espacios tan emblemáticos como el Ateneo de Madrid, Tribunal Constitucional, Palacio Real de Aranjuez, Alcazaba de Málaga, los castillos de Vélez Blanco y Aracena o las catedrales de Granada y Baeza, recibiendo los elogios de la crítica especializada. Asimismo, han sido galardonados con el Premio HEBE 2016 en la categoría de Música y han sido finalistas como Mejor Grupo Joven en los Premios GEMA 2019, otorgados por la Asociación de Grupos Españoles de Música Antigua, a la que pertenecen desde 2017.
A lo largo de su trayectoria, han efectuado colaboraciones con conjuntos como la Orquesta Barroca de Granada, el Coro Tomás Luis de Victoria, el Coro de Ópera de Granada o Todos los Tonos y Ayres, así como con solistas vocales de reconocido prestigio, como Raquel Andueza, Marta Infante, Lucía Caihuela, Eva Juárez, Olalla Alemán, Soledad Cardoso o Aurora Peña, entre otros. Además, han realizado varios proyectos artísticos y de investigación en colaboración con entidades como el Instituto Cervantes, el Instituto Confucio o el Centro de Documentación Musical de Andalucía. Por otra parte, han realizado grabaciones para RTVE y China Central Television, y han participado en las películas España, la primera globalización (2021) e Hispanoamérica (2024), dirigidas por el galardonado realizador José Luis López-Linares.
Carlos Mena, director musical
Formado académicamente en la Schola Cantorum Basiliensis de Basilea, con R. Levitt y R. Jacobs. Estudia música medieval con D. Vellard y ópera con N. de Figueiredo. Recibe master clases de E. Kirkby y Ch. Brett.
Como cantante interpreta repertorio desde la música histórica hasta la música contemporánea en las salas más prestigiosas del mundo: Musikverein y Konzerthaus de Viena, Concertgebouw de Ámsterdam, Teatro Colón Buenos Aires, MET de Nueva York, Berliner Philarmonie, Opera City Hall de Tokyo, Osaka Symphony Hall, Sydney Opera House, Concert Hall de Melbourne… Ha interpretado a Radamisto de Händel en la Felsenreitschule de Salzburgo, Speranza (L’Orfeo de Monteverdi) en la Staatsoper de Berlín, Il Trionfo de Händel en la Grosses Festspielhaus de Salzburgo, Europera 5 de J. Cage en el Festival de Flandes, Oberon de Britten en el Teatro Real de Madrid, Ascanio de Mozart en el Barbican Center de Londres, Viaje a Simorgh de Sanchez-Verdú en el Teatro Real de Madrid y en el Gran Teatro del Liceu de Barcelona Apollo en Death in Venice de Britten.
Sus cerca de 50 recitales grabados para Mirare, Glossa y Harmonia Mundi, Sony, Deutsche Grammophon han logrado diversos premios como Diapasón de Oro del año, CD Compact al mejor disco de Renacimiento, Internet Classical Award 2004, Editor’s Choice de Gramophon o Excepcional de Scherzo. Interpreta lied y estrena obras de compositores como J. Torres, J. Magraner, G. Erkoreka y A. Iglesias.
Como director de orquesta dirige a las Orquestas Ciudad de Granada, Sinfónica de Galicia, Principado de Asturias, Ciudad de Córdoba, Sinfónica de Navarra, Sinfónica de Bilbao, Orquesta y Coro de la RTVE, La Cetra Barockorchester, Orquesta Barroca Catalana… Es director artístico del Coro de la Orquesta Sinfónica de Galicia. Ha sido artista residente del año en la Orquesta Ciudad de Granada, en el CNDM y en el Beaux Arts de Bruselas. Es jurado del Premio de las Artes de la Fundación Princesa de Asturias.
Carlos Mena es profesor de canto histórico en la Schola Cantorum Basiliensis e imparte clases en la Academia de Música Antigua de la Universidad de Salamanca, Musikex y Cursos Manuel de Falla de Granada. Ha sido invitado a los conservatorios superiores de Gran Canaria, Salamanca, Musikene y Copenhague, en la Operastudio de la Universidad de Alcalá de Henares, en la UAX, en el Centro Superior Katarina Gurska y en los talleres del Teatro Real de Madrid.
Antonio Ruz, director de escena
Es actualmente uno de los creadores más destacados de la danza en España. Su discurso, desarrollado al frente de su propia compañía, o en colaboraciones para reputadas agrupaciones nacionales e internacionales, como la alemana Sasha Waltz & Guests, se sustenta en un acentuado interés por el carácter más abierto de la danza.
Tras una formación en flamenco, danza española, ballet y una importante carrera como bailarín en grandes compañías como el Ballet Víctor Ullate, Ballet del Gran Teatro de Ginebra, Ballet de la Ópera de Lyon o la Compañía Nacional de Danza, crea, en 2009, su propia compañía en busca de una identidad creativa a través de la investigación en el campo del movimiento y la colaboración multidisciplinar: No Drama (2010), Ignoto (2011), Ojo (2012), Vaivén (2014), À L’espagnole, fantasía escénica (2015), Beautiful Beach (2015), Recreo (2015), Double Bach (2016), Presente (2018), entre otros. Estrecho colaborador de Juan Kruz Díaz de Garaio Esnaola y Estévez-Paños Compañía; participa como coreógrafo en producciones teatrales de Andrés Lima y Miguel del Arco así como en la zarzuela El Barberillo de Lavapiés (2019) con la dirección de Alfredo Sanzol. Colabora en proyectos inclusivos de la Fundación Psico Ballet – Maite León.
En 2020 estrena Electra (2017) con el Ballet Nacional de España. Entre sus últimas creaciones figuran Gugurumbé (2020) en colaboración con Fahmi Alqhai/ Accademia del Piacere, Signos (2021) junto a la violista Isabel Villanueva, In Paradisum (2021) con la Compañía Nacional de Danza, La Noche de San Juan (2021), un ballet inédito de Roberto Gerhard co-producido por la Fundación Juan March y el Gran Teatro del Liceu, AÚN (2021), su primera película de danza en coproducción con elAmor, o Pharsalia (2022) coproducido por los Teatros del Canal y el Museo Universidad de Navarra. En 2023, participa como coreógrafo en la producción de la ópera Macbeth del Gran Teatre del Liceu con la dirección artística de Jaume Plensa. Ruz es el director escénico y de movimiento del espectáculo Tercer Cielo (2023) de Rocío Marquez y Bronquio y el coreógrafo de la serie de AtresPlayer Las Noches de Tefía dirigida por Miguel del Arco.
Actualmente, compagina la gira de una nueva creación de su compañía, proyectos de encargo en Europa a la vez de impulsar el proyecto de un nuevo Centro Coreográfico en Córdoba, su ciudad natal. Es Premio Nacional de Danza 2018 en la categoría de Creación, el Premio Ojo Crítico de Danza de RTVE 2013 o el Premio de Arte de la Fundación Juan Bernier Córdoba en 2018.
Pablo Árbol, vestuario
Desde sus primeras incursiones en el mundo del diseño en 2012, Pablo Árbol ha dedicado su carrera a la creación y expresión artística a través de la moda. Con una sólida formación en diseño de moda, culminó sus estudios en 2019, formándose además en modelaje sobre maniquí con Javier Martín (patronista de Balenciaga), entre otros.
A lo largo de los años ha colaborado estrechamente con importantes profesionales del sector, como la diseñadora de tocados y complementos Mar Cano, cuyo curso de formación dejó una huella significativa en su desarrollo creativo. Su pasión por el diseño se ha manifestado en diversas colecciones presentadas en la MBFWSevilla, Crearte, Pasarela Flamenca Granada, Pasarela Fortuny, y el 07/SF San Telmo Fashion Show, donde exhibió colecciones como Transparencias, Albero, Individual, Herminia y Herminia 2.0, Silencio, Único Volante y La Pasión.
Un capítulo significativo de su trayectoria ha sido la colaboración con la compañía de baile de Patricia Guerrero, premio Nacional de Danza 2020, diseñando el vestuario para los espectáculos Paraíso Perdido, Proceso Eterno y Deliranza. También ha trabajado para Eva Manzano en El tiempo de los Monstruos y la ópera de pasarela metAMORfosis de Diana Pérez Custodio. Desde finales del 2023 hasta 2026 Árbol será el diseñador de vestuario del Ballet Flamenco de Andalucía, dirigido por Patricia Guerrero.
Su trabajo se ha sido expuesto en la muestra Yo soy Flamenco y en el programa de televisión Flash Moda de TVE, entre otros medios de comunicación.
Ha recibido el premio Joven Emprendedor y Joven Promesa en los Premios Ejemplares por la igualdad del Ayuntamiento de Peligros (Granada, 2017); el Premio al Mejor Diseñador de Moda en los III Premios Hebe (Granada, 2019); y el Premio a la Mejor Interpretación de Vestuario de Cine en la edición La moda se viste de cine, en el Festival Internacional de Cine de Granada en 2021.
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